Quantcast
Channel: Pandilla Chang de jóvenes narradores
Viewing all articles
Browse latest Browse all 366

La última mujer y el último hombre

$
0
0
Por Fedosy Santaella


Nos respetamos tanto, fuimos tan cool, tan políticamente correctos, nos temimos tanto que nos aburrimos y, al tiempo, nos extinguimos.


La última mujer y el último hombre sobre la Tierra se encuentran por casualidad en una avenida de la ciudad desolada. Él la mira, sonríe, la saluda y camina hacia ella. Ella se tensa, se hace de su celular y, aunque este ya no sirve (porque llegó el fin del mundo, porque ya no hay internet) hace como si escribiera en Twitter que un hombre la está mirando con ojos de acosador.

Finalmente, el hombre llega a su lado, y ella, que está entregada al posteó de su tuit, no se mueve. Él le mira el vestido y comenta:

—Ese vestido está hecho con una tela de tintura número 234 de Gravina Luchoria contaminante de compuesto flexopolietimetano de punto 7 asbesto rosado. Eres una asesina del planeta, de los animales y de las personas.

Ella lo mira asombrada:

—Pero si ya no queda planeta… ni personas.
—Animales sí.
—Sí y no me los como.
—Bueno, yo también estuve de acuerdo y luché por la definitiva prohibición del consumo de carne, y hasta apoyé las ejecuciones de los carnívoros, en especial las de los comedores de hamburguesas… Pero… este… ya sabes, se acabó el mundo, y me he visto obligado a comer uno que otro animalito…
—¡Me indigno! —espetó la mujer.
—¡Y tú, que usas ropas altamente contaminantes!

Callaron.

—Pero igual te quedan muy bonitas —se atrevió a decir el hombre.

La mujer irguió la columna y dio un salto hacia atrás. Miró a los lados, escribió en un tuit en su celular sin baterías.

—¡Auxilio! —gritó, además.
—Oye, es sólo un simple halago.
—¡Auxilio!
—Ya nadie puede oírte, tonta. Jejeje.
—¡Además te ríes y me llamas tonta, descarado! ¡Sabes que reír está prohibido!
—Sí, sí… Con eso es algo que nunca estuve muy de acuerdo, por cierto.
—El humor es ofensivo, discriminatorio, criminal.
—Sí, pero es bueno reírse de vez en cuando, ¿no?
—¡No! Y mira este texto en el que estamos.
—¿Cuál?
—¡Este que el lector está leyendo! Pretende ser gracioso, pero soy yo la que está quedando mal en este texto machista.
—Tienes razón. Ya voy a tuitear y a denunciar al escritorcito de este texto del patriarcado.

El hombre sacó a su vez su celular inservible y empezó a mover sus dedos sobre él, como si escribiera. Terminó y miró a la mujer:

—¡Oh, qué gusto! Tenía tiempo que no me ofendía contra alguien. De verdad, este texto del que somos protagonistas es indignante.
—¡Yo también lo denunciaré!
—¿Y viste lo que escribió en el encabezado, apenas comenzando?
—No, ¿qué?
—Puso esto: «Nos respetamos tanto, fuimos tan cool, tan políticamente correctos, nos temimos tanto que nos aburrimos y, al tiempo, nos extinguimos».
—¡Qué horror! ¡Estoy indignada!

Ahora fue la mujer la que movió rápidamente sus dedos sobre la pantalla apagada de su celular.

Volvieron a quedarse en silencio.

—¿Por qué se habrá acabado el mundo? —dijo el hombre como para sí mismo.
—No sé, todo iba tan bien. Habíamos logrado penalizar el piropo, encarcelar y ejecutar a los comedores de carne y a los tomadores de leche, habíamos sentenciado a muerte a todos los irrespetuosos humoristas, a los que usaban esponjas para lavar platos, a los que no limpiaban sus teclados con frecuencia, a los que no emitían opiniones por Facebook y Twitter, a los que ponían objeciones a nuestras causas.
—Sí, habíamos hecho mucho… Después empezaron a decir que esos logros nuestros estaban acabando con la humanidad.
—¡Tonterías! Estábamos llenos de buenas intenciones.
—Bueno… Recuerda que en cierto momento dejamos de tener sexo y por lo tanto de reproducirnos.
—Nuestras razones tuvimos. ¡Eran justas!
—¿Sí?, ¿cuáles?
—Este… ya no recuerdo, pero el Gran Tribunal de Opiniones Indignadas de las Redes Sociales tuvo razón en prohibirlo.
—No sé, si uno deja de reproducirse, pues…
—¡Ay no, los hombres siempre pensando en la lujuria! Seguro que estás teniendo esta conversación sobre el sexo como forma de excitarte y acosarme.

La mujer tomó su celular, empezó a mover sus dedos sobre la pantalla.

—¿Qué escribes?
—Que empezaste una conversación sobre sexo no deseada.
—¡Y tú usas ropas contaminantes! ¡Lo pondré en las redes!
—¡Hablas de mi ropa, de mi vestido, de lo que me pongo para ocultar mi cuerpo de tus ataques! ¡Conviertes mi ropa en tu fetiche! ¡Eres un depravado que estás de parte de todos los depravados del mundo!
—¡Por favor! ¡Como has dicho tú: ya no queda nadie! Además, no es cierto lo que dices. ¡Exageras!
—¿Exagero? ¿Exagero? ¡Qué descaro!
—Me parece que exageras, esa es mi opinión. ¿No puedo opinar? ¿Crees que tú tienes la verdad? ¡Mi opinión es mi verdad! ¡Y parece que te molesta que opine, que no esté de acuerdo contigo! ¡Eres una tirana que crees que sólo tú tienes la verdad!
—Todo lo contrario, hombres como tú siempre creyeron tener la verdad, y apoyaron a los monstruos de la humanidad.
—Eso no es cierto… ¡Eso no es cierto!
—¡Sí lo es!

Volvieron a quedarse callado unos segundos.

—¿Por qué se habrá acabado el mundo? —dijo la última mujer como para sí misma.

El último hombre la miró con tristeza y luego respondió:

—No sé, a lo mejor no se ha acabado, y es el escritorcito de este texto que nos puso en esta situación.
—Es un texto indignante.
—¡Sí, lo es! ¡Ofensivo, indignante, poco serio, patético, irresponsable, patriarcal y egoísta!

Ambos se pusieron a mover sus dedos sobre sus celulares inservibles. Mientras lo hacían, ella pensó que quizás podría andar con él por un rato, pero con cuidado, claro, porque aquel tipo sin duda era todo un acosador. Él pensó que la mujer le gustaba, a pesar de que era una irresponsable que usaba esas ropas con tinturas contaminantes y de que no lo dejaba que sus opiniones fuesen sus verdades. 

      Al final, cuando terminaron de escribir en sus celulares inservibles, ya habían decidido que no valía la pena, que no andarían con persona tan indigna…



Y así, se alejaron uno del otro, indignados.

Viewing all articles
Browse latest Browse all 366

Trending Articles


Vimeo 10.7.1 by Vimeo.com, Inc.


UPDATE SC IDOL: TWO BECOME ONE


KASAMBAHAY BILL IN THE HOUSE


Girasoles para colorear


Presence Quotes – Positive Quotes


EASY COME, EASY GO


Love with Heart Breaking Quotes


Re:Mutton Pies (lleechef)


Ka longiing longsem kaba skhem bad kaba khlain ka pynlong kein ia ka...


Vimeo 10.7.0 by Vimeo.com, Inc.


FORECLOSURE OF REAL ESTATE MORTGAGE


FORTUITOUS EVENT


Pokemon para colorear


Sapos para colorear


Smile Quotes


Letting Go Quotes


Love Song lyrics that marks your Heart


RE: Mutton Pies (frankie241)


Hato lada ym dei namar ka jingpyrshah jong U JJM Nichols Roy (Bah Joy) ngin...


Long Distance Relationship Tagalog Love Quotes